El comunicado conjunto, firmado por los ministros de Asuntos Exteriores de Iraq, Qatar, Arabia Saudita, los Emiratos Árabes Unidos, Omán, Kuwait, Bahrein, Jordania, Egipto, Sudán, Argelia, Comoras, Yibuti, Somalia, Libia, Mauritania, Pakistán, Turquía, Chad y Brunei, expresó profunda preocupación por el deterioro de la situación y pidió el cese inmediato de la agresión israelí contra la República Islámica.
“La escalada de tales tensiones plantea serias amenazas a la seguridad y estabilidad de toda la región”, advirtió la declaración, enfatizando que los continuos ataques israelíes contra Irán podrían tener repercusiones peligrosas.
Los ministros también destacaron la importancia de proteger las instalaciones nucleares que están bajo las salvaguardias del Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA), de acuerdo con las resoluciones pertinentes del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas, al referirse al ataque israelí a la instalación nuclear de Natanz en la ciudad de Isfahán, en el centro de Irán.
Calificaron cualquier ataque a instalaciones nucleares como una clara violación del derecho internacional y humanitario.
Reafirmando su compromiso con la no proliferación, los ministros pidieron a todos los países de la región que se adhieran rápidamente al Tratado sobre la No Proliferación de las Armas Nucleares (TNP).
Los ministros de Asuntos Exteriores rechazaron y condenaron todos los actos de agresión israelíes contra Irán que violan el derecho internacional y la Carta de las Naciones Unidas, pidieron esfuerzos de desescalada y subrayaron la urgente necesidad de un alto el fuego para evitar una mayor inestabilidad en la región.
El ministro de Asuntos Exteriores de Irán, Abbas Araghchi, ha mantenido conversaciones telefónicas con varios de sus homólogos de Asia Occidental y Europa en los últimos días, instándolos a adoptar una postura contra la continua agresión del régimen israelí contra la República Islámica.