Gaza no tiene cementerios. Los cuerpos de los mártires están en el suelo



En una escena escalofriante, la morgue del Hospital Nasser en Khan Yunis, al sur de la Franja de Gaza, anunció que se había quedado sin espacio para entierros. El único cementerio que quedaba en la ciudad estaba lleno, en medio de los incesantes bombardeos de la maquinaria de guerra israelí y la escalada de su genocidio contra la población de la Franja, señala el Centro de Información Palestino desde Gaza.

Un cartel negro colgado en un silencio sangriento en la pared de la morgue del único hospital central de Khan Yunis dice: "Les informamos que no tenemos tumbas, ya que la cantidad disponible se ha agotado".


Son palabras breves, pero que resumen capítulos de dolor acumulado, no sólo porque la muerte toca a la puerta sin parar, sino porque ni siquiera los muertos encuentran ya un lugar donde contener sus cuerpos bajo la tierra.

Cadáveres bajo el sol... no hay sombra para los muertos

El periodista palestino Siraj Tabash escribió esta mañana: «El sol se pone sobre los mártires que yacen en el cementerio. No hay dónde enterrarlos. ¿Dónde hemos llegado, gente?».

Sus palabras documentan un momento que trasciende el ámbito de la catástrofe. Según testigos presenciales, los cuerpos de aproximadamente siete mártires fueron arrojados cerca de los muros del cementerio sur, sin encontrar un lugar de descanso final, mientras que sus familias no pudieron garantizarles el derecho humano más básico: una tumba.


En un conmovedor testimonio, un testigo del abarrotado cementerio dijo: «La gente trae a sus mártires y se queda allí, desconcertada, buscando un lugar donde enterrarlos, pero no hay ni un centímetro. Hasta las lápidas han desaparecido».

La agresión persigue a los vivos... y pisotea la dignidad de los muertos

Muhammad al-Ghalban, director de la Autoridad de Dotaciones de Khan Yunis, describió la situación como una "doble catástrofe humanitaria" y señaló que la ocupación no se contenta con matar civiles y atacar a los vivos, sino que también profana activamente la santidad de los muertos arrasando cementerios, exhumando tumbas y robando cuerpos.


Al-Ghalban reveló que la guerra israelí destruyó aproximadamente 40 de los 60 cementerios de la Franja de Gaza, incluido el cementerio Hajj Muhammad en Khan Yunis, que no se salvó de las excavadoras militares que arrancaron tumbas y exhumaron los cuerpos de los mártires en medio de un ensordecedor silencio internacional.

Añadió: «Ya no tenemos fosas, ni siquiera suficientes patios para enterrar a las víctimas. Usamos los patios de los hospitales públicos como último recurso, convirtiéndolos en cementerios temporales... pero eso ya no es suficiente».

Tumbas temporales y humillación permanente

El único cementerio establecido durante la guerra para albergar al creciente número de mártires no duró mucho. En pocos meses, se transformó en un último recurso, y luego, tras llenarse por completo, se cerró a los muertos. El cierre no fue una decisión administrativa, sino una declaración de la derrota de la dignidad humana ante la muerte repetida.


Los que no fueron enterrados en fosas temporales quedaron a la intemperie, bajo los rayos del sol los rostros de los mártires, mientras sus familiares levantaban las manos al cielo, incapaces de conseguir un solo metro de tierra en su patria para los cuerpos de sus seres queridos.

Excavación de tumbas y robo de cadáveres: crimen tras crimen

La Oficina de Medios del Gobierno en Gaza documentó la exhumación de más de 2.000 tumbas en 13 cementerios diferentes por parte de las fuerzas de ocupación israelíes y el robo de al menos 300 cadáveres, en flagrante violación del derecho internacional y las leyes divinas que criminalizan la violación de la santidad de los muertos.

El destino de estos cuerpos permanece envuelto en misterio, en uno de los capítulos más horribles del crimen organizado, que no sólo cobra vidas sino que destroza incluso los recuerdos enterrados bajo tierra.

Un grito bajo los escombros: ¿Dónde está la dignidad?

No solo Khan Yunis, sino toda la Franja de Gaza se encuentra sumida en una compleja catástrofe. Sin agua, sin electricidad, sin medicinas... y hoy, sin tumbas.

¿Dónde queda enterrada la dignidad cuando el mártir queda al sol?

¿Dónde se reza por el alma cuando se roban los cuerpos?

¿Dónde se sitúa la conciencia mundial ante un crimen cometido dos veces... contra los vivos y los muertos?

La muerte no es el final... pero el olvido sí

Lo que ocurre en los cementerios de Gaza no es una simple crisis funeraria, sino un colapso total de los cimientos de la dignidad humana. El mártir que se alzó defendiendo su tierra y sus derechos hoy no encuentra dónde albergar su cuerpo, ni tierra que le proporcione un lugar de descanso final.

En Gaza, los muertos esperan... en largas filas bajo el sol, en tumbas improvisadas y en los corazones de sus seres queridos que no han encontrado tumba, convirtiendo el dolor en brasas ardientes que nunca se apagan.  

Diario Al-Quds Libérationصحيفة القدس ليبراسيون - Global Intellectual Property Registry Nº: 1 607138 370884 All rights reserved ©2016|

About .